La Diplomacia se mudó a la conectividad del mundo 2.0

Gestionar la agenda diplomática, política y de gobierno en la web 2.0 está en boga y el impacto de este cambio en la vida ciudadana tiene tantas aristas que mantendrá ocupado a los sociólogos, comunicólogos e historiadores por años y aún no será entendido en toda su dimensión. El debate y la discusión en el entorno participativo, interactivo y colaborativo de la internet se genera de una forma más fácil e intensa y permite posicionar mensajes, tomar decisiones de manera inmediata, crear matrices de opinión en el marco de una estrategia bien delineada y movilizar masas a velocidades vertiginosas impensadas en tiempos cuando no existía la red.

En los últimos meses, los venezolanos, hemos asistido a un fenómeno que ha originado un cambio de alto impacto en la forma como consumimos y gestionamos nuestra comunicación en momentos de alta efervescencia socio-política: La exposición de la agenda Diplomática Mundial en la red que hace posible prever escenarios, construir hipótesis sobre las acciones tomadas por los países, a la par de orientarnos frente a los procesos políticos en curso.

Diplomacia 2.0 ¿Cómo ha sucedido esto?

El difícil acceso a los medios de comunicación tradicionales en Venezuela, la censura y el control mediático, ha volcado la atención a las redes sociales y al manejo de la información a través de estas plataformas. Eso ha sido perfectamente entendido por los líderes políticos. Un caso reciente lo dio el Presidente (E) de Venezuela, Juan Guaidó, al emplear los canales digitales para tomar acciones de gobierno. El pasado 22 de enero de 2019 Guaidó hizo uso de su cuenta oficial en Twitter e Instagram para anunciar el nombramiento del representante especial ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Gustavo Tarre Briceño.

Un trabajo de análisis de las prácticas informativas y de relación con los públicos desde los websites de Cancillerías latinoamericanas, realizado en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), las cancillerías de los 13 países de la región estudiados tienen presencia en la red e información institucional en este espacio, lo que significa una visibilidad óptima en la plataforma online. De igual manera, todas ofrecen información de contacto para el visitante y 50% de ellas brindan la oportunidad de realizar trámites a través del portal.

En las salas de prensa de las 13 cancillerías se cuenta con una sección de noticias, mientras que el 69% de los casos también ofrecen los comunicados emitidos por el órgano oficial. Ninguna de estas instituciones posee blog en su página web.

Explicando el fenómeno

Gracias al avance tecnológico, la naturaleza de la plataforma, ha convertido a las redes sociales, en un lugar de encuentro, interacción y en la primera fuente para buscar o confirmar cualquier tipo de información. Así de fuerte se ha forjado esta comunidad y así se siente su impacto sobre la vida social y política. A pesar de que los medios de comunicación y las instituciones forman parte de esta comunidad online, la verdad es que la agenda de conversación puede ser tomada por sus usuarios, quienes deciden cuáles son los temas que más les interesan para la discusión. De alguna forma, la tecnología ha empoderado a los ciudadanos para que formen parte activa de las discusiones con base en sus valores y necesidades.

Los gobiernos e instituciones públicas, han entendido y asimilado que la web 2.0 ofrece una herramienta valiosa y de incuestionable alcance para generar reacciones en audiencias clave el marco de la ejecución de una estrategia. En el área de la política exterior y la diplomacia el mundo online permite influir en el comportamiento o toma de decisiones de otros gobiernos, a través de la movilización  de los ciudadanos. El diálogo abierto, directo y permanente facilitado por esta plataforma manifiesta un camino privilegiado para llegar a las audiencias clave y aunque todavía es un terreno desconocido para muchos, cada vez son más las cancillerías que abren sus puertas al mundo 2.0, tomando en cuenta que el trabajo diplomático en estos días no solo tiene que ver con gestionar la política exterior de un país, sino también con enviar los mensajes adecuados a la audiencia indicada.

La web 2.0 es un puente para conectar elementos que antes no encontraban un enlace duradero. Es por ello, que gracias a estas plataformas las instituciones y gobiernos pueden establecer una relación sin intermediarios con su audiencia y entender, de primera mano, sus intereses y comportamiento. Las limitaciones entre la producción y el consumo de la información son borradas en el espacio de la web 2.0 pues cualquiera que tenga acceso a ella tiene las mismas capacidades de actuar de forma activa  y en tiempo real en el procesamiento y difusión de la información.

La diversidad de cada uno de los usuarios permite a los encargados de la política exterior comprender y acceder a todo tipo de imaginarios colectivos a través de una misma herramienta, lo que permitirá la elaboración y ejecución de estrategias diplomáticas más efectivas. El esquema unidireccional emisor – canal – receptor queda en desuso en la web 2.0. De esta forma, se genera un sistema más democrático, transparente y horizontal de comunicación, ideal para ser aprovechado por las cancillerías.

En resumen, estos son los factores que han impulsado a la diplomacia a un proceso de modernización y ajuste al mundo digital:

  • Avances tecnológicos que han tenido la capacidad de reducir intermediarios en actividades y procedimientos administrativos.
  • Democratización y cambios políticos y culturales de las sociedades.
  • Incremento en la colaboración y participación de la población joven.
  • Nuevos actores diferentes a los tradicionales.
  • Globalización y nuevos temas en la agenda, en cuya conformación cada vez participan más sectores.
  • Noticias en tiempo real y al alcance de todos.

Fuentes consultadas

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