El liderazgo en jaque: una crisis de sentido

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Te invito a reflexionar sobre la visión del Doctor, consultor, coach y autor de varios libro sobre el Liderazgo, Arnoldo Arana sobre un tema de vital importancia: La crisis de liderazgo mundial.

El profesor Arnoldo Arana, ha sido mi coach y mentor por varios años. Es un líder empático con una suprema sabiduría y entendimiento de los problemas de actualidad. Le consulté sobre su visión acerca de lo que considero es uno de los temas que ocupa la mente de los consultores a nivel global y donde tenemos mucho que aportar, principalmente generando pensamiento critico: La crisis global de liderazgo.

El profesor Arana es Doctor en Consejería (Univ. Rhema, EE. UU.), Magíster en Gerencia y Coach certificado por la ICF. Con más de 25 años de experiencia, acompaña a líderes y organizaciones en procesos de transformación ética y estratégica. Es fundador de Vida Efectiva, conferencista internacional y autor de referencia en liderazgo responsable, autodominio personal y madurez emocional.

Aquí les dejo un resumen de lo que fue nuestro encuentro telefónico donde intercambiamos visiones acerca de los desafíos de liderar en entornos complejos, volátiles, inciertos y ambiguos (Vuca).

Carmen Yolanda (CY): ¿Dr. Arana, usted sostiene que atravesamos una profunda crisis de liderazgo en el siglo XXI. ¿Podría explicarnos a qué se refiere exactamente?

Arnoldo Arana (AA): Así es. No estamos simplemente ante una carencia de líderes carismáticos. Lo que vivimos es una crisis estructural del liderazgo. Muchos líderes actuales no logran generar confianza, sentido de propósito, cohesión o transformación sostenible en entornos crecientemente complejos. En el fondo, se trata de una desconexión entre las expectativas del entorno y la forma en que se ejerce la autoridad.

CY: ¿Cómo ve el contexto global y que desafíos plantea?

AA: Un papel determinante. Las organizaciones operan en un contexto VUCA: volátil, incierto, complejo y ambiguo. Sin embargo, muchos estilos de liderazgo siguen atrapados en paradigmas del siglo pasado: control vertical, jerarquías rígidas y búsqueda de certezas. Ese modelo se ha vuelto obsoleto. Hoy se requiere un liderazgo que escuche antes de actuar, que humanice antes que controle.

CY: ¿Cuáles son los síntomas más evidentes de esta crisis silenciosa?

AA: Hay varios, y están documentados. El primero es la desvinculación emocional. Según Gallup (2023), solo el 23% de los empleados se siente comprometido con su trabajo. Más del 75% está presente físicamente, pero emocionalmente desconectado. Esto es lo que Jim Harter, de Gallup, denomina “una cultura de indiferencia productiva”. Además, el 59% de las personas realiza apenas lo mínimo, lo que se ha llamado quiet quitting. Y un dato clave: el 51% de los trabajadores está considerando dejar su empleo.

CY: ¿Qué hay detrás de esa tendencia a la renuncia o al desapego?

AA: La rotación creciente es otro síntoma claro. Lo más revelador es que las personas no se van por temas salariales. Según McKinsey & Company (2022), el principal motivo de renuncia es la falta de sentido, de reconocimiento y de conexión con los líderes. Las personas no dejan sus trabajos, dejan a sus jefes. La gran renuncia no fue un episodio aislado, sino un síntoma de agotamiento cultural. De hecho, el estudio The Great Attrition muestra que el 41% se fue por ausencia de pertenencia, y el 54% porque no se sentía valorado como persona.

CY: ¿Qué consecuencias tiene esto para la salud organizacional?

AA: Una de las más graves consecuencias es la fatiga organizacional. Equipos saturados, sin visión compartida ni empatía desde el liderazgo. El informe de Deloitte (2023) muestra que el 60% de los líderes reconoce que su gente está al borde del burnout. Y el 70% de los empleados siente que su organización no se preocupa por su bienestar mental. Cuando se exige sin acompañar, el liderazgo deja de ser guía y se convierte en carga.

CY: ¿El burnout ya es una enfermedad reconocida?

AA: Sí. La OMS ya lo clasifica como enfermedad. Y la OIT advierte que la depresión y la ansiedad —derivadas muchas veces del estrés laboral— generan la pérdida de 12 mil millones de días de trabajo al año. Es un fenómeno sistémico. Donde no hay empatía, claridad de roles ni cultura del cuidado, el desgaste se profundiza. Y el costo es altísimo: humano, ético y financiero.

CY: Hablemos de la confianza. ¿Qué está ocurriendo con la legitimidad de los líderes?

Dr. Arana: Vivimos una desconfianza sistémica. El liderazgo se ha vuelto, en muchos casos, reactivo, incoherente o autoindulgente. Y la gente se repliega. El Edelman Trust Barometer 2024 muestra que solo el 46% confía en los líderes empresariales para decir la verdad y hacer lo correcto. Peor aún, crece la percepción de que actúan solo en su propio interés. En América Latina, ese nivel de desconfianza alcanza el 69%.

CY: El Trust Barometer 2025 aporta datos aún más duros…

AA: Correcto. En su edición más reciente, con más de 32.000 entrevistados en 28 países, el Edelman Trust Barometer 2025 confirma un panorama crítico: el 61% de las personas siente que las élites gobiernan en su contra, y solo el 36% cree que la próxima generación vivirá mejor. El activismo hostil, incluso el que recurre a desinformación, gana terreno como reacción ante liderazgos percibidos como cínicos o desconectados. Y otro estudio —Canvas/UMA (2025)— revela una paradoja alarmante: el 76,5% exige liderazgo transformador, pero apenas el 12,5% percibe que exista en su entorno laboral.

CY: En síntesis, ¿qué tipo de liderazgo necesitamos hoy?

AA: Un liderazgo con coraje moral, escucha empática y visión compartida. No se trata de controlar, sino de inspirar. Dejar de lado el ego y reconectar con el propósito. Liderar ya no es mandar. Es servir, comprender, y construir comunidades con sentido. Si no entendemos esto, el liderazgo seguirá en jaque. Y con él, el futuro de nuestras organizaciones y nuestras democracias.

Me resuena mucho la profundidad del análisis del Dr. Arana, si algo queda supremamente claro es que definitivamente el desafío que enfrentan hoy los gerentes, CEOs y los gobernantes de la era digital es liderar con responsabilidad y conciencia

Imagina por un momento:

¿Cuántas crisis podrían evitarse si los CEOs y gobernantes actuaran con ética y responsabilidad?
¿Cuánto mejoraría la confianza si las decisiones empresariales estuvieran alineadas con el bien común?

Hoy más que nunca, el liderazgo es una responsabilidad moral.

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📌Sobre el Dr. Arnoldo Arana

Consultor y Coach de liderazgo consciente

Doctor en Consejería (Univ. Rhema, EE. UU.), Magíster en Gerencia y Coach certificado por la ICF. Con más de 25 años de experiencia, acompaña a líderes y organizaciones en procesos de transformación ética y estratégica. Es fundador de Vida Efectiva, conferencista internacional y autor de referencia en liderazgo responsable, autodominio personal y madurez emocional.

Arnoldo Arana es miembro de la Red de Consultores de Alto Valor de Sinergia Iberonet.

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— Carmen Yolanda Moreno